Parroquia Santuario

Nuestra Señora del Rosario

Evangelio del día

Evangelio de hoy Martes 1 de Octubre de 2024
Martes de la semana 26 del Tiempo Ordinario
Lectura del santo evangelio según San Lucas 9, 51-56
Evangelio del día
“ Jesús tomó la decisión de ir a Jerusalén ”

Cuando ya se acercaba el tiempo en que tenía que salir de este mundo, Jesús tomó la firme determinación de emprender el viaje a Jerusalén. Envió mensajeros por delante y ellos fueron a una aldea de Samaria para conseguirle alojamiento; pero los samaritanos no quisieron recibirlo, porque supieron que iba a Jerusalén. Ante esta negativa, sus discípulos Santiago y Juan le dijeron: «Señor, ¿quieres que hagamos bajar fuego del cielo para que acabe con ellos?»

Pero Jesús se volvió hacia ellos y los reprendió. Después se fueron a otra aldea.

Reflexión del Evangelio de hoy

Confía siempre en Dios

Job, modelo admirable de paciencia, ante unas calamidades como la enfermedad de la lepra, la hostilidad de sus familiares y amigos, sufre una crisis profunda en su fe en Dios.

También influye la presencia de los tres amigos que le vienen a consolar, pero que en realidad le van a hacer de «abogados del diablo», sugiriéndole dudas y atacándole. Job estuvo siete días en silencio, acompañado de estos amigos, hasta que finalmente prorrumpe en el grito tremendo de rebelión que leemos hoy.

Se le ha derrumbado todo: el apoyo de los suyos, su fe, su concepto de la bondad de Dios. Y se formula una y otra vez la gran pregunta: «¿por qué?». El grito de Job es desgarrador. Maldice el día en que nació, preferiría morir: «muera el día en que nací… ¿por qué no perecí al salir de las entrañas de mi madre? ¿por qué dio luz a un desgraciado, al hombre que no encuentra camino porque Dios le cerró la salida?».

Cuando nos toque vivir días tan oscuros como los de Job, hagamos nuestro el salmo de hoy: «Señor, Dios, de día te pido auxilio, de noche grito en tu presencia, mi alma está colmada de desdichas, me has colocado en lo hondo de la fosa». El Sábado Santo fue todo oscuridad para Jesús. Pero amaneció la mañana de la resurrección.

¿Sabemos convertir en oración nuestra duda? ¿sabemos fiarnos de Dios, como hará en definitiva Job, y sobre todo Jesús, a pesar de que no entendamos el porqué de tantas cosas en la vida? Los cristianos tenemos un dato nuevo: la muerte y resurrección de Jesús. Pero también nos sigue costando dar con la clave para la respuesta a esta misteriosa pregunta.

Obediente al padre y por amor a los hombres

“Jesús tomó la decisión de ir a Jerusalén”. Con esta decisión, comienza la etapa final, la etapa más importante de su vida. Por esta decisión de Jesús, Jerusalén se va a convertir en el centro geográfico de toda la historia de la salvación. En Jerusalén Jesús nos dará la mayor prueba de su amor al morir en la cruz y asumir así lo más doloroso de nuestras existencias.

Desde Jerusalén Jesús entrará, por la resurrección, en una vida nueva, vida que Él inaugurará no sólo para Sí mismo sino también para todos nosotros. En Jerusalén nacerá igualmente la Iglesia, la comunidad de los discípulos de Jesús, unida por el Espíritu Santo que Jesús les va a enviar.

Jesús inicia, pues, el viaje definitivo de su vida: desde Galilea a Jerusalén y al Padre. No hará este viaje solo: lo hará acompañado de sus discípulos. Pidamos al Señor que nosotros también le acompañemos realmente en este viaje suyo compartiendo con Él las mismas esperanzas y las mismas penas.